A los del servicio técnico de Neuralife:
No voy a enviarles más sensomails con insultos a medias. Este chip de ustedes, por más dañado que esté, sigue siendo efectivo en impedirme decirles adónde pueden irse, manga de… Sé que pedí la implantación cerebral con el programa «Sofisticado y bien educado», pero mi interés era acercarme a hombres, no el tener problemas en hacer un reclamo.
Voy por el quinto divorcio, con o sin su plaquita instalada en mi cabeza, así que ya sé que no sirvo para las relaciones. Pero cuando quise darme de baja y ustedes me ofrecieron el programa «Candidato ideal para oficinas en Marte», volví a caer en la trampa. Soy un...
Ahora solo pienso en trabajo. Y sigo sin poder insultar. Sin embargo, no es por eso que escribo:
Fue anoche, en medio de esa delicia que es el límite entre el dormir y estar despierto, con mi almohada bien mullida y sábanas que no emiten ningún tipo de estática. Una voz empezó a hablar, dentro de mi cabeza. Era muy suave, incluso sensual.
—¿Te gusta? —dijo, una y otra vez—. ¿Tendrías el valor de usarla?
Del susto, desperté. Pensé que mi canal de porno cerebral había vuelto y traté de sintonizarlo. Pero no. ¡Si ustedes lo reemplazaron por «sea empleado del mes»!
No fue un sueño. No.
Si hoy, en plena siesta en el baño de la oficina, la voz regresó. Esta vez, con imágenes muy claras de lo que ofrecía. Era una máscara metálica, con una expresión terrible. Brillaba. Me ofrecía tener a la mano todo lo que yo deseara, sin necesidad de chips ni ninguna otra mier… Y me pidió a cambio ¡solo una suscripción mensual de mil Rys!
¡Era spam! ¡Su Neurachip ya ni es efectivo contra eso! Así que escribo ahora para que quede registrado, por si no salgo de ésta. Voy a sacármelo como sea, no me importa. No quiero más nada. Solo quiero volver a ser yo mismo. Y, si sobrevivo a esta locura, lo primero que haré será insultar. Voy a decir todas las chanchadas que se me ocurran, todas las que recuerde. ¡Y los voy a mandar a ustedes a…!
Sensomail cortado, por exceso de caracteres.
Envío finalizado.
***
Relato escrito a partir del Argumento 5 del Reto juevero de esta semana, propuesto por El Demiurgo de Hurlingham. No quería perdérmelo, pero siempre llego los sábados re tarde a sentarme a escribir. Espero entrar, pero si no igual ha sido muy divertido este reto. Además, me inspiró un poquito la noticia del chip cerebral anunciado por Elon Musk. Vaya a saber lo que nos espera en el futuro. La realidad se parece cada vez más a Black Mirror.
Voy a darme una vuelta por los relatos del resto.